29 noviembre 2012

Naranjas confitadas caseras (a mi manera)



Excelente elaboración para consumirlas directamente o guardar para bollería, ahora que vienen las fiestas navideñas se pueden utilizar para hacer los pannettones o el tortel de reyes sin tener que comprarlas ya confitadas, además el almibar que nos dejan podemos añadirlo sustituyendo parte del azúcar como una miel que enriquecerá el sabor de las masas con el aroma de las naranjas.

Para hacerlas deberemos primeramente lavarlas muy bien, frotando su piel para desprender cualquier resto indeseable para el consumo y favoreciendo que el poro se abra para que pueda perder amargor.

Luego las herviremos enteras durante un rato, un cuarto de hora o veinte minutos en agua abundante.

Escurrimos el agua y las volvemos a introducir en agua límpia, dejándolas así en reposo durante 24 horas.

Volvemos a escurrirlas y las cortamos en rodajas.

Las ponemos a fuego muy  lento con un 70% de su peso de azúcar y un 30% de agua aproximadamente.

Si es necesario las espumaremos por si han soltado algún resto indeseable.

Dejamos que cuezcan en el almibar durante unos 30 minutos y las retiramos del fuego sin sacarlas del recipiente de cocción.

Las dejamos que reposen ahí durante un día.

Repetimos la operación de cocción nuevamente a fuego muy lento y volvemos a retirar del fuego dos veces más. Tomarán un aspecto transparente.

Hay que controlar que el almibar no caramelice ya que oscurecería las naranjas.

Antes de que enfríen trás la última cocción las ponemos  en un escurridor para que suelten el almibar, esto se hace aún en caliente porque el almibar espesará mucho si enfría demasiado y se quedaría adherido a las rodajas de naranja.

Una vez frías las podemos guardar en un recipiente hermético poniendo entre ellas papel parafinado y ya podemos utilizarlas para lo que queramos.

Espero que os sirva esta entrada como una solución, ya que además de ser cara su compra no tendremos que depender de salir a buscarlas cada vez que las necesitemos y ahora que es temporada merece la pena hacerlas en casa.











2 comentarios:

  1. Me viene genial Carmen, ahora quiero hacer una solo de cascaras.

    Un beso

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    1. Me alegra de que te haya servido la entrada, es muy importante la primera parte para evitar el desagradable sabor amargo típico de las cáscaras, puedes hacerlo de la misma manera, incluso el limón, para otras frutas también va bien, solo hay que calcular un poco a ojo la primera cocción en agua, a veces solo es necesario escaldarlas para quitarles la piel y luego seguir el mismo procedimiento. Besos.

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