01 septiembre 2011

Sardinas


Qué mejor época para consumir sardinas que el verano, estación óptima para su consumo ya que es cuando saben mejor y se encuentran en cantidad y muy frescas en los mercados a un precio moderado.  Podemos hacer una compra abundante aprovechando estas oportunidades y prepararlas de distintas maneras.

Una forma de prepararlas es asándolas en una parrilla como las que véis en la fotografía superior y otra es escabechándolas, con lo que tendremos preparado un plato de antemano rico y sabroso.

También podemos asarlas en el horno cubiertas de un majado de pan rallado ajo y perejil, quedan muy ricas igualmente y nos libramos un tanto del olor que desprenden al hacerlas en parrilla que suele impregnar toda la casa y no ser del agrado de todos.

Os traigo aquí la receta del escabeche a mi manera, como lo hacía mi abuela y mi madre, espero que quienes no lo hayáis hecho nunca os animéis a prepararlas de esta forma.  Recuerdo que cuando era niña, mi madre las preparaba mientras estábamos en el colegio por la tarde y mi hermano y yo no podíamos resistirnos a pedirle un plato cuando regresábamos aún cuando estaban calientes y desprendían ese aroma tan rico, con lo que siempre acababamos haciendo una merienda-cena.

Ingredientes:

  • Sardinas frescas
  • Harina para rebozarlas
  • Vinagre de buena calidad
  • Aceite de oliva
  • Sal, laurel, tomillo, ajos, pimentón dulce y orégano.


Preparación:

Limpiamos y descabezamos las sardinas, las secamos bien con papel absorvente, las salamos y enharinamos sacudiendo el exceso de harina para que nos se nos queme en el fondo de la sartén posteriormente.

Las freímos y vamos colocándolas en un recipiente, mejor que sea de porcelana, barro o vídrio, no pasa nada si es de plástico pero éste absorverá parte del olor que tardará en marchar, con lo que luego no podremos utilizarlo para guardar otros alimentos distintos.

En el mismo aceite caliente ponemos una buena cantidad de ajos machacados con un golpe, digamos que dependiendo del tamaño una media docena y por supuesto de la cantidad de sardinas que vayamos a escabechar. Agregamos el laurel (2 hojitas) y el tomillo(una ramita) y dejamos medio minuto en el aceite caliente y retiramos del fuego, añadimos el pimenton dulce (2 cucharaditas)y el vinagre(suficiente para que queden posteriormente cubiertas las sardinas), volvemos a poner al fuego agregándole el orégano en rama o en hojas (1 cucharadita), dejamos que arranque el hervor y cubrimos las sardinas con el preparado.

Si no queremos que queden demasiado fuertes podemos añadirle al vinagre medio vasito de agua cuando lo agreguemos al resto de ingredientes.

*Las cantidades que he puesto entre paréntesis sería la ideal para medio kilo de sardinas.

Dejamos que maceren de un día para otro y estarán en su punto.


Un plato de siempre¡¡¡¡¡¡





3 comentarios:

  1. Me encantan las sardinas, aquí las comemos mucho en espeto y asadas en barbacoa y es que están de muerte.
    No se porque blogger no me avisa ultimamente de algunas actualizaciones, menos mal que te tengo mas o menos controlada, jajaja.
    Besitos.

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  2. Pues yo te había escrito un comentario respondiendote y tampoco veo que haya salido, te decía que Dharma también se queja de lo mismo. Bueno ahora toca dar paso a los boquerones, jejeje.Un beso.

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  3. qué pinta más buena tienen estas sardinas, te arreglan una cena con una ensaladita y ya, plato sanísimo y bueno, a mí también me gustan las recetas de toda la vida, se te ve muy desenvuelta, gracias por compartirlas, bsitos

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